La vaquita

Dice Pedro Hernandez Guanir que el ser humano construye la felicidad en tres planos, como una pirámide escalonada: en el primer nivel la satisfacción de las necesidades proporciona placer. Si sientes la necesidad de algo, es porque sientes su carencia.Carencia de alimentos, de poder, de amar o ser querido, pero esa carencia te crea desasosiego, te inquieta y te impulsa a buscar aquello que necesitas. Si lo consigues te quedas tranquilo, satisfecho, si no te inquietas más, te frustras, sufres, pero puede que te impulse de nuevo a seguir buscando. Pero de nuevo surgen otras carencias y se despiertan otras necesidades. Este es el principio de equilibrio-desequilibrio, el motor de la vida. En la vida la carencia no es despreciable, en esta vida se precisa la necesidad, la dificultad, la ausencia, el fallo, el fracaso, todo ello es necesario para ponernos en marcha. El problema no está en la necesidad, sino en cómo la mente administre las dosis, el tipo y la valoración de esa necesidad. La frustración es una palanca para la vida, pero depende cómo soy capaz de administrala.

Pesimismo-optimismo

En psicología, el optimismo-pesimismo se refiere a la forma en que nos explicamos a nosotros mismos los contratiempos, el fracaso y la adversidad que todos padecemos a lo largo de la vida.

Estressss

Todos tenemos la experiencia que despues de vivir una situación conflictiva, difícil, después de tener que enfrentar numerosos problemas, nos sentimos físicamante enfermos.
Seyle, médico canadiense, en 1936, fue el primero en detectar científicamente que el estres podía tener efecto en los estados físicos.

Respuesta

Como me habéis escrito con dudas sobre el cuento de la disyuntiva de Gawain, amigo del rey Arturo, les cuento la respuesta y algunas reflexiones. El noble Gawain replicó que la dejaría elegir por sí misma, que él respetaba su decisión. Al oír esto, ella le anunció que sería una hermosa dama de día y de noche, porque él la había respetado y le había permitido ser dueña de su vida.

Moraleja:Debemos respetar siempre el espacio individual de cada persona. Sólo somos dueños de nuestra propia existencia."Dios le concede pies a cada ave, pero no se mete en el nido."

El cerebro más evolucionado

Uno de los más impactantes mitos de la Grecia Antigua es quizás el nacimiento de la diosa Palas Atenea.

Cuando Metis, encarnación de la Prudencia, queda embarazada de Zeus, Gea y Urano le vaticinan al enamoradizo dios:

-Tras la hija que vas a tener con Metis, vendrá un hijo que te destronará al igual que tú hiciste con tu padre y éste con tu abuelo.

Temeroso Zeus de que aquello pudiera realizarse, se tragó a su esposa sin más. Un día, aquejado por un terrible dolor de cabeza, sin saber qué hacer para tratar de quitárselo, suplicó a su hijo Hefaistos que le diese un hachazo en la frente. Al hacerlo quedó perplejo al ver brotar de la cabeza del señor del Olimpo una hermosa joven, cubierta de armadura guerrera, con el casco, la lanza y la égida, y cantando himnos bélicos: era Palas Atenea, la diosa de la Sabiduría, de la guerra, y del amparo de artistas.

La gran decisión

Hoy nuestro blog será diferente: primero disfrutaremos el cuento y cuando tú me respondas al acertijo que plantea, analizaremos las respuestas.

El joven rey Arturo fue sorprendido y apresado por el monarca del reino vecino mientras cazaba furtivamente en sus bosques. El rey pudo haberlo matado en el acto, pero le ofreció la libertad, siempre y cuando en el plazo de un año hallara la respuesta a una pregunta difícil. La pregunta era: ¿Qué quiere realmente la mujer?.

Al joven Arturo le pareció imposible contestarla. Con todo, aquello era mejor que morir ahorcado, de modo que regresó a su reino y empezó a interrogar a la gente. A la princesa, a la reina, a las prostitutas, a los monjes, a los sabios y al bufón de la corte... En suma, a todos, pero nadie le pudo dar una respuesta convincente.

No darse por vencido

La educación, hasta ahora se ha basado en la idea que es posible enseñar a las personas conocimientos y normas de conducta, pero nunca a ser más inteligentes, porque "lo que natura non da salamanca non presta".

Sin embargo, hoy la ciencia ha demostrado que no nacemos con una “cantidad”de inteligencia sino con la capacidad de adquirirla. La inteligencia hay que aprenderla a través de la enseñanza a lo largo de toda la vida. A ser inteligente, pues, se aprende.

La ciencia también ha comprobado que la capacidad intelectual no es fija: aumenta o disminuye, es decir, si no se la estimula y utiliza, disminuye.